El valor oculto de una cartera de pleitos: de MasOrange a los despachos de abogados
El diario Expansión publicó recientemente que MasOrange (la teleco nacida de la fusión de MásMóvil y Orange) negocia con el fondo estadounidense Fortress Investment Group la venta de una cartera de pleitos fiscales valorada en cientos de millones de euros frente a la Administración española.
Según la información, Fortress habría llegado a plantear un pago inicial de 25 millones de euros no reembolsables a cambio de participar en las ganancias futuras derivadas de esos litigios. Aunque el escenario está evolucionando y se estudian alternativas, lo que demuestra este movimiento es que una cartera de litigios tiene un valor en sí misma, y que los fondos especializados están dispuestos a asumir riesgos con tal de acceder a su potencial retorno【Expansión, 19 de agosto de 2025】.
Pleitos como activo transferible
Fortress es un fondo que se caracteriza por adquirir activos litigiosos: compra pleitos con descuento, asume el riesgo, y si el fallo es favorable, obtiene la rentabilidad. Para MasOrange, la operación tiene sentido porque le permite obtener liquidez inmediata y liberar balance de incertidumbres fiscales.
Este esquema, aunque habitual en grandes corporaciones, es perfectamente extrapolable a otros sectores, entre ellos el de los despachos de abogados.
El paralelismo con los despachos profesionales
Al igual que una teleco puede vender una cartera de pleitos fiscales, un despacho de abogados acumula a lo largo de los años una cartera de casos pendientes, reclamaciones o procedimientos en curso que representan valor económico.
Cuando un despacho se plantea una compraventa, una integración o incluso la sucesión generacional, esa cartera de asuntos vivos es uno de los principales activos que se ponen sobre la mesa. No solo refleja ingresos futuros, sino también la solidez de las relaciones con los clientes, la confianza depositada y la capacidad de generación de negocio recurrente.
Cartera de asuntos = capital intangible
Para que esta cartera tenga un valor claro y reconocible, es fundamental:
- Documentar adecuadamente los casos pendientes. Qué fase procesal ocupan, qué probabilidades de éxito tienen y cuál es la previsión de ingresos.
- Valorar objetivamente el riesgo. Igual que Fortress descuenta la probabilidad de éxito en los pleitos fiscales, un comprador de despacho valorará los riesgos y tiempos de resolución.
- Transparentar la relación con el cliente. La continuidad del cliente tras la operación es lo que convierte la cartera en un activo real y no en una expectativa incierta.
Conclusión
La noticia de MasOrange confirma algo que en el mundo jurídico a veces se pasa por alto: los pleitos, litigios y casos pendientes son un activo económico que se puede cuantificar, negociar y transferir.
En la compraventa de un despacho profesional, esta cartera de asuntos no solo aporta valor financiero, sino que también refleja la trayectoria, reputación y confianza construida por el despacho.
En definitiva, igual que las grandes corporaciones monetizan sus litigios, los despachos deben aprender a poner en valor su cartera de pleitos como parte esencial de su patrimonio intangible.
Fuente: Expansión, 19 de agosto de 2025.
Para saber más: https://www.amadocorporate.com/la-compra-de-vlex-por-clio-por-1-000-millones-un-nuevo-paradigma-en-la-industria-legal/
