En el mundo de las asesorías, la confianza y la satisfacción del cliente son pilares fundamentales. Sin embargo, apoyarse únicamente en las recomendaciones como fórmula de crecimiento puede convertirse en un riesgo silencioso. La pregunta que deberíamos hacernos es: ¿qué ocurre cuando ese flujo de recomendaciones se estanca o se vuelve insuficiente para sostener el futuro del negocio?
El límite del crecimiento orgánico
Las recomendaciones son valiosas porque transmiten credibilidad y reducen la barrera de entrada para nuevos clientes. Pero también tienen un techo: dependen de la velocidad con la que los clientes actuales recomiendan, y de la disposición de terceros a confiar en esa referencia. En un mercado cada vez más competitivo, quedarse en este modelo puede significar crecer demasiado lento o incluso quedarse atrás.
📊 Ejemplos sencillos de crecimiento
Imaginemos tres asesorías con un mismo punto de partida: 100 clientes iniciales.
- Asesoría A (solo recomendaciones): crece un 5% anual gracias a referencias. Al cabo de 5 años, tendría unos 127 clientes. Suponiendo que no se haya perdido ningún cliente
- Asesoría B (actividad comercial y marketing digital): combina redes sociales, SEO y campañas SEM, logrando un 15% anual. En 5 años, alcanzaría unos 201 clientes.
- Asesoría C (integraciones o compras de carteras): apuesta por adquirir pequeños despachos o carteras de clientes, con un crecimiento del 25% anual. En 5 años, llegaría a unos 305 clientes.
La diferencia es clara: mientras la asesoría que depende solo de recomendaciones apenas logra un crecimiento modesto, las que diversifican sus estrategias multiplican su base de clientes y consolidan su posición en el mercado.
El gráfico muestra claramente cómo las tres estrategias se diferencian en el tiempo:
- La línea azul (solo recomendaciones) apenas se eleva.
- La línea naranja (marketing digital) crece con fuerza sostenida.
- La línea verde (integraciones) se dispara, reflejando un crecimiento exponencial
Este gráfico también muestra de forma visual cómo evoluciona el número de clientes en 5 años:
- Asesoría A (solo recomendaciones): crecimiento lento y limitado, apenas supera los 125 clientes.
- Asesoría B (marketing digital y actividad comercial): la curva es más pronunciada, alcanzando alrededor de 200 clientes.
- Asesoría C (integraciones y compras): la línea se dispara, superando los 300 clientes en el mismo periodo.
¡La idea fuerza!
“Quedarse únicamente con las recomendaciones significa crecer mucho más despacio que quienes diversifican sus estrategias”
Reflexión para los titulares de asesorías
Seguir confiando únicamente en las recomendaciones puede parecer cómodo y seguro, pero es una estrategia que limita el potencial de expansión. El mercado actual exige visibilidad digital, capacidad comercial y, en algunos casos, visión estratégica para integrar otros negocios. No se trata de abandonar las recomendaciones —que seguirán siendo un activo valioso—, sino de complementarlas con herramientas que permitan un crecimiento más sostenido y previsible.
Conclusión
El riesgo de no evolucionar es quedarse atrás. Una asesoría que no invierte en marketing, actividad comercial o integraciones corre el peligro de convertirse en invisible frente a competidores más dinámicos. La decisión está en manos de cada titular: ¿seguir creciendo lentamente con recomendaciones, o dar el salto hacia un modelo más ambicioso y sostenible?
Pata saber más: https://www.amadocorporate.com/una-revision-interna-clave-para-valorar-un-despacho-profesional-antes-de-su-venta-o-integracion/





